Si llevas tiempo planeando tu boda, imaginando tu camino hacia el altar y viéndote feliz en tu luna de miel, pero lo único que haces es comprar huevos para llevar a Santa Clara para que no llueva… ¡Detente! El refrán, “Novia mojada, novia afortunada” puede ser real.

La lluvia puede no ser la mejor aliada para una boda, pero en Villa Laureana llevamos años viendo el lado bueno de la vida y podemos decirte que una nube no estropeará tu enlace.

Abre tu paraguas, ¡que empezamos!

Supersticiones para un día de boda con lluvia

Que el día de tu boda amanezca gris es una gran preocupación para muchas parejas. Y casarte en otoño o invierno, los meses más húmedos del año, puede no ser una gran idea… A no ser que veas la otra cara de la moneda.

Hay un sinfín de supersticiones con un punto positivo sobre este tema. ¿Te apetece conocerlas?

  • Llevar huevos a Santa Clara

Antes lo hemos mencionado porque no hay superstición más arraigada que ésta.

Se trata de llevar una docena de huevos a los conventos que las monjas clarisas tienen repartidos por toda España.

Si te casas en Madrid tienes que ir al Paseo de Recoletos nº11 y llamar al antiguo portalón que está al lado de la Iglesia de San Pascual.

Es una tradición centenaria que intenta hacer el milagro de despejar las nubes y que parece que es bastante efectiva dado el número de donaciones que se reciben cada año.

  • Cantar días antes de tu boda

Esta es una conducta controvertida porque cantar denota alegría. De hecho, quien canta sus males espanta, pero hay quien asegura que cantar mal atrae la lluvia y por eso no conviene hacerlo cuando la fecha de tu boda está próxima.

Como dice Alanis Morissette: “que llueva el día de tu boda es irónico“ porque, aunque una tormenta pueda fastidiarte, también puede ser un buen augurio.

Sigamos con las tradiciones pasadas por agua.

  • Las lágrimas en tu ceremonia 

Llorar en la boda es una creencia peculiar porque, según se cuenta, si los novios no derraman ni una lágrima durante la ceremonia con seguridad lo harán después en su divorcio. Es muy dramático, ¿no te parece?

También se dice que es mejor llorar en la boda para así no hacerlo jamás después del matrimonio.

¿Quieres un buen consejo de Villa Laureana? Siéntete libre para expresar tus emociones y no te contengas, ¡que para algo es tu boda!

  • Las tijeras

Es una costumbre menos conocida que la de los huevos de las clarisas. Se trata de colocar unas tijeras bajo el colchón la noche antes de la boda para “cortar” las nubes y con el mismo sentido, también se dice que clavar unos cuchillos en la tierra de algunas macetas ayuda a atraer el buen tiempo.

Cuanto menos, curioso.

novia mojada novia afortunada villa laureana

¿De dónde viene el refrán: «¿Novia mojada, novia afortunada”?

Si vives en el campo o tienes un pequeño terreno de cultivo sabrás que la lluvia es sinónimo de fertilidad para tu huerto y en todas las civilizaciones se contempla el beneficio de la lluvia que nutre y alimenta la tierra.

Si extiendes el sentido de este refrán al matrimonio imagina que la fortuna es ampliar la familia, de ahí que también se diga “novia bienaventurada”

¿Qué te parece esta manera de verlo?

3 ventajas de casarse con lluvia

Ya has descubierto que la lluvia puede ser un buen augurio y tiene su encanto.

Aquí tienes 3 ventajas de una boda con lluvia en las que no has pensado:

  1. Un álbum de boda original

La magia que crea la lluvia se verá reflejada en tus fotos. Imagínate riendo a carcajadas y abrazada a tu pareja.

Es la mejor ocasión para marcarte un Singing In The Rain a lo Frank Sinatra y vuestro fotógrafo sabrá captar esos momentos tan originales en una boda. Te aseguramos que tu álbum de boda no lo tendrá nadie.

¡Cantar bajo la lluvia es una terapia para espantar el mal humor!

  1.  ¿Y después de la lluvia?

No hay tormenta sin arco iris y ese será el regalo más asombroso que puedas hacer a tus invitados. Y no vas a necesitar encontrar la bolsa de monedas de oro que dicen que hay al final de un arco iris.

  1. La música del agua

No conocemos a nadie a quien no relaje el sonido de las gotas contra los cristales. Es un sonido que hipnotiza y que creará una atmósfera idílica en tu boda.

Conclusión

Una boda con lluvia es hermosa e igual de romántica y, si esto te ocurriera, siempre tienes la posibilidad de ver el vaso medio lleno y pensar que unas gotas de agua clara pueden traer consigo cosas buenas.

Lo mejor, puesto que es imposible acertar al 100% en la previsión del tiempo, es celebrar tu boda en un lugar versátil y que responda con eficacia a cualquier eventualidad.

En Villa Laureana estamos preparados para tu «sí, quiero» rotundo y feliz con o sin lluvia.

Tu finca de boda al norte de Madrid